El dinero no tiene corazón ni le fluyen sangre caliente. El metal y los billetes carecen de patria ni humanidad. La empresa que más posibilidades tiene de llevarse Perlas Majórica a su terreno pretende de entrada despedir a cerca de 180 trabajadores, de los 275 que tiene la plantilla. Para ello ha puesto encima de la mesa 10 millones de euros, concretamente 9.700.000 euros. Le gana a su siguiente pujador en más de 2,2 millones de euros.

Con los casi 10 millones de euros pagará el despido de los empleados y quedará la plantilla adelgazada a una aproximación de 100 empleados. La mayoría en las tiendas de Porto Cristo y Manacor, paquetería y distribución y en los talleres y laboratorios. Se nos antoja los justos, pero para que sea rentable eso es lo que hay. El alcalde de Manacor Miquel Oliver pide que el dinero tenga corazón y despida a los menos posible, que se quede la producción en nuestro municipio y que Majórica vuelva por sus fueros.

El nuevo propietario es accionista de Carrefour y DÍA, el francés Gregorie Agustin Bontoux-Halley. El titular judicial concursal busca en primer lugar la viabilidad de la compañía. Ahora habrá que escuchar a trabajadores y sindicatos, las otras ofertas. Entonces se valorará todo y se ratificara o no al nuevo comprador. La marca de Perlas Majórica es lo que desean los inversores, sus canales de distribución, unas tiendas frente al paso de 5 millones de visitantes en el Manacor de Rafa Nadal.